JOVEN ORIUNDO DEL MUNICIPIO DE TLAOLA LLEGA A LAS SEMIFINALES EN EL CONCURSO “DESCOLONIZA TU COMIDA EN MÉXICO”

José Alfredo Lorenzo Cruz, de 29 años y oriundo de Tlaola, ha sido elegido como semifinalista en el concurso “Descoloniza tu Comida en México”, organizado por Slow Food México. Su participación se centra en la “quesadilla fina”, un pan tradicional de la región en peligro de extinción. La mayoría de los panaderos que aún lo elaboran son adultos mayores. El concurso tiene como objetivo preservar culturas y tradiciones alimentarias.

El Sr. Eduardo Garrido, un ser humano excepcional, es la razón por la cual gran parte de mi conocimiento sobre la panadería tradicional ha prosperado. Como vocero en la campaña “Descoloniza Tu Comida”, convocada por la red Slow Food Pueblos Indígenas, tuve el honor de presentar la Quesadilla Fina, un manjar cuyo valor trasciende los sentidos. El propósito de esta campaña fue visibilizar la importancia de este alimento en nuestra cultura como comunidad indígena y destacar la urgencia de preservarlo, ya que se encuentra en peligro de extinción.

Esta publicación tiene como objetivo rendir homenaje al arduo trabajo del Sr. Eduardo Garrido en la preservación de esta majestuosa tradición. A sus 85 años de edad, ni el cansancio ni los achaques de salud pueden detenerlo en su misión de conservar la técnica y el proceso de elaboración tradicional de la quesadilla fina. Es uno de los pocos maestros panaderos tradicionales del municipio que continúa siguiendo la receta tal como la heredó de sus ancestros.

No quería perder la oportunidad que nos brindaba la campaña “Descoloniza Tu Comida” para dar a conocer este maravilloso alimento. Siento un profundo compromiso social al conocer este producto y al pertenecer al municipio de Tlaola. La quesadilla fina merece ser resguardada y su disfrute fomentado, ya que forma parte de nuestra identidad como comunidad indígena. Además, ha evocado una nostalgia gustativa en los habitantes mayores de la población, quienes ya no pueden disfrutar de este pan tradicional que los transportaba de vuelta a su niñez.

El Sr. Eduardo Garrido es un tesoro viviente, un guardián de nuestra herencia culinaria, y su labor incansable merece todo nuestro respeto y admiración. Su dedicación a mantener viva la tradición de la quesadilla fina es un tributo a la riqueza de nuestra cultura y a la importancia de preservarla para las generaciones venideras.