No des oro por cuentas de vidrio

Por: Rodolfo de la Cruz Meléndez

“Los españoles, aprovechando la ingenuidad de los nativos, cambiaban cuentas de vidrio por objetos de oro”.

-Enseñanzas de la conquista

La sed de justicia que alienta en nuestro pueblo desde que fue sojuzgado por la conquista española ha sido usada por los económicamente poderosos y sus partidos, para escalar el poder de la nación y, hasta el momento, todos le han fallado al pueblo.

El PRI, con la promesa de que a todos les haría justicia la revolución, mantuvo a los sectores obrero, campesino y popular uncidos a su carro electoral. Pero después de 70 años tuvo que abandonar el poder con el voto de castigo emitido en su contra. Así llegó el PAN que hizo del cambio su divisa. Como la inmensa mayoría estaba harta de la miseria, la corrupción y las mentiras de los gobernantes, fácilmente se alzó con la mayoría, y vivimos 12 años de más promesas. Aprendida la lección, volvió a llegar el PRI, pero fue más de lo mismo. Al pueblo lo ilusionan con promesas y, ya en la silla, resulta evidente la engañifa.

Morena ganó arrolladoramente en 2018 porque prometió castigo para los culpables de la pobreza, los corruptos según ellos y una vida digna para el pueblo: respeto a las tierras de los pueblos originarios, justicia para los desaparecidos, solución al problema del narcotráfico, crecimiento de la economía al 4 por ciento anual y, en primer lugar,  atender las carencias de los pobres y marginados de siempre.

Es hora que el pueblo conozca y acepte la cruel realidad. También Morena lo engañó. No ha resuelto ninguno de los grandes problemas nacionales y, lo que es peor, pretende imponernos una dictadura. Así lo dejan ver sus reformas electorales en Puebla.

  Su plan perverso es ganar la aceptación y el voto de los más humildes con sus transferencias monetarias, recibir votos a cambio de efectivo, engañarnos otra vez con cuentas de vidrio.

¿Dónde queda la buena alimentación, la educación de calidad, la atención médica eficiente y al alcance de todos, la elevación espiritual de los 100 millones de pobres?  ¿Acaso con los 800 pesos mensuales que está recibiendo una minoría les alcanza para pagar todos esos servicios? ¿Para pagar guarderías, refugios para mujeres víctimas de violencia?

¿Dónde está el presupuesto para la introducción de los servicios públicos a las colonias marginadas, y los pueblos ancestralmente atrasados? Esos programas que el PRI y el PAN sí ponían a disposición de las comunidades interesadas en progresar, López Obrador los erradicó del presupuesto federal y estatal, bajo el tramposo argumento de que prohijaban la corrupción de los líderes y, por castigar a los corruptos, sacrificó a millones de mexicanos que no tienen energía eléctrica, ni agua potable, ni alcantarillado, ni hospitales, escuelas, carreteras.   

No hay nada de mejora en los servicios, nada de presupuesto para este tipo de obras. Todas las promesas fueron el vestido de oropel para disfrazar su dictadura, y mantenernos viviendo en la pobreza y la marginación. Por eso acusamos a Morena de ser un fraude monumental.

Llamamos al pueblo a sacar a Morena del poder en 2021, a que nadie le regale ningún voto, para impedir que se siga burlando de nosotros. Los llamamos a cuidar su voto como la niña de sus ojos, a no cambiarlo por cuentas de vidrio ni migajas. Los invitamos a votar por los candidatos antorchistas, porque ahí donde hemos gobernado se palpa y se ve el progreso de las mayorías.

La solución a los problemas inmediatos está en nuestro programa de lucha antorchista, que gira en torno a cuatro ejes fundamentales: es obligación del gobierno proporcionar empleo para todos, garantizar salarios remuneradores, hacer que paguen más impuestos los que tienen más ingresos y reorientar el gasto público para combatir la miseria y la marginación. Ese sí es un programa en beneficio de las mayorías.

Antorcha no da gorras, ni despensas, ni dinero contante y sonante a cambio del voto, tampoco promete un analgésico de efecto inmediato. Propone a todos los que deseen progresar a unirse y organizarse en nuestras filas. Y para que sea posible sacar a Morena del poder invitamos a formar una gran alianza con los empresarios deseosos de lograr el desarrollo nacional, con los intelectuales que busquen la superación espiritual de las mayorías y con los trabajadores humildes dispuestos a construir un estado y una patria progresista.

El cambio que proponemos es trascendente y totalmente posible, es verdaderamente transformador de nuestra vida pobre e ignorante, para alcanzar una vida realmente equitativa y humana. La propuesta de Antorcha es oro, y no cuentas de vidrio.